“Preserve the roots” nuestra sesión de inspiración, más folk dentro del estilo boho. Una sesión donde las raíces del mundo rural que envuelve nuestro territorio a través de una masía unen a nuestra pareja en su particular elopement. Haciendo un guiño al color del año PANTONE 16-1546 Living Coral y a su filosofía de preservación. En una masía rural que nos recuerda de dónde venimos, nuestras raíces, unas raíces que provienen de la agricultura, en definitiva, de nuestras familias.
Un elopement, con su historia de amor, la de nuestra pareja y su unión. En una tierra fértil, encontrándose en una masía, uniendo lo tradicional con su propio estilo, celebrando su compromiso el uno con el otro, homenaje a las raíces del mundo rural mediterráneo.
Mostrando los elementos que han escogido para este día, elementos naturales de nuestra tierra y los coloridos de las flores, joyas y decoración en diferentes escenarios dónde darse el “Sí quiero”.
Nuestra novia boho folk es libre a la hora de elegir su vestido y se decanta por un estilo más hippie en unas dos piezas compuesto por body de espalda traslúcida, botonadura clásica y lazada al cuello, y falda de tules superpuestos. Sin olvidar su tocado de flores. Él, con traje de cuadro ventana en tonos marrones y grises.
La cámara nos muestra las primeras impresiones sobre la localización de la masía. Paredes de tierra, ventanas y puertas oxidadas con los exteriores del entorno. Situando a nuestra pareja en la masía.
Vemos ahora nuestra pareja en el interior de la casa, preparándose para su celebración. Es un momento de unión a través del peso de la fotografía realzando sus cuerpos, sus miradas y los detalles de sus vestidos junto a una localización austera.
La pareja sale de la casa para celebrar su ceremonia, para ello nuestra novia reina con su impresionante corona de flores naturales; y su majestuoso ramo de flores con pompones de lana como giño al trabajo de tejer de muchas mujeres de la zona.
Ella espera a su futuro marido en un ambiente creado para la ocasión, el la sorprende con una declaración de amor. Los dos posan en este escenario esperando la llegada de su tentador pastel de bodas de tres pisos decorado con flores y frutas frescas.
La tarde va cayendo y llega el momento en que deciden celebrar su unión, en un altar para ellos, donde se intercambian sus anillos y se besan.
La felicidad es inmensa y juntos reposan para pasar la noche y culminar su día.
Para hacer realidad éste stlye shoot contamos desde Lligabosc Wedding Planner con proveedores excepcionales: para la novia escogimos un vestido de Ramón Herrerías y exuberante tocado de flores de Joan Conejo que además se encargo del diseño creativo y del ramo de la novia. De las joyas, se encargó Margarida Aldabó después de ver el vestido y la modelo. Irene de El Tocador de Arlo se encargo de realizar durante todo el stlye shoot el maquillaje muy natural de la novia y del novio. Blackpier nos facilitó el traje del novio y Jaiak se encargó de todo el material de la sesión. El punto más dulce del Elepoment lo trajo Sucrerie pastisser para nuestros novios Esther y Gabriel.
Y sobre todo el fotógrafo que ha hecho posible que este trabajo salga a la luz Arnau Sentenach.
¿Queréis ver todas las fotos de este style shoot? Podéis verlas aquí.